El dolor de oídos es una dolencia de la que pocos niños se libran. En algunos casos de manera más persistente que en otros. En algunos casos puede ser provocado por una infección catarral de las vías respiratorias altas, o por una infección de garganta; en otros, puede deberse a otras causas como las lesiones que se provoca el niño a sí mismo rascándose el conducto auditivo o por la entrada de agua en el oído, por ejemplo durante la práctica de la natación.
Categoría Cuidados del ou00eddo
El dolor de oídos es una dolencia de la que pocos niños se libran. En algunos casos de manera más persistente que en otros. En algunos casos puede ser provocado por una infección catarral de las vías respiratorias altas, o por una infección de garganta; en otros, puede deberse a otras causas como las lesiones que se provoca el niño a sí mismo rascándose el conducto auditivo o por la entrada de agua en el oído, por ejemplo durante la práctica de la natación.
Las piscinas son lugares de esparcimiento para todas las personas, pero especialmente para los niños, ya que les encanta pasar horas sumergidos en ellas. El problema es que casi nunca lo hacen con protección a nivel de los oídos, ya que para nosotros los padres es como algo que no le dedicamos atención, por no saber que el agua de las piscinas condiciona la producción de una patología llamada otitis externa o, coloquialmente llamada otitis de las piscinas, que son muy dolorosas y de difícil tratamiento.